Titulo: Strangers in Space (Extraños en el espacio) Arco: The Sensorites (Los Sensorites)
Escrito por: Peter R. Newman Dirigido por: Mervyn Pinfield y Frank Cox
Fecha de emisión: 20 de junio de 1964
- "It all started out as a mild curiosity in a junk yard and taken us back to prehistoric times, the Daleks, Marco Polo, Marinus and the Aztects" (Todo comenzó como una curiosidad sana en un desguace que ahora nos ha llevado a tiempos prehistoricos, los Daleks, Marco Polo, Marinus y los aztecas)
Así comenzamos nuestra nueva aventura, esta vez en el espacio exterior. Una frase que nos introduce de nuevo en la esencia continuista de Doctor Who. Arcos totalmente independientes entre si, pero que están unidos dentro de la historia de nuestros protagonistas. Además sirve para resaltar el cambio que han sufrido los cuatro desde que se conocieron. Donde antes había miedo y desconfianza, ahora brilla el espíritu de aventura y el compañerismo.
- Si, aquella extraordinaria disputa que tuve con aquel rey inglés. Henry (Enrique) VIII.
¿Sabíais que me tiro la nariz de un clérigo protestante? - Doctor
- ¿Y qué hiciste? - Barbara
- ¡Se la lancé de vuelta! - Doctor
"Strangers in Space" no podría parecerme más interesante, sobre todo por su capacidad para dejarnos con la miel en los labios. Cada minuto que pasa, algo sucede y no sabemos a qué se debe.
Empezamos con el aterrizaje de la Tardis en un punto fijo y a la vez en movimiento y que además, emite una estática que impide ver el exterior. Aunque este misterio quedará brevemente en segundo plano por las conversaciones que mantienen los cuatro, nada más salir se verá reforzado por todo lo que se encuentran.
El escenario que tenemos a continuación, la nave espacial, es realmente inquietante por esa imposibilidad de saber que está pasando realmente. Tenemos esos dos tripulantes, que en un principio están muertos, pero que luego resulta que no lo están y que hay unas criaturas (los Sensorites) que a través de telepatía están impidiendo que la nave se escape de la órbita de su planeta (la Sensphere). Aquí es cuando empiezan de verdad las preguntas en el espectador; ¿por que no les dejan huir ni tampoco los llevan a su planeta? ¿por que deciden mantenerles con vida en ese estado de coma?
Pero quizás la pregunta más importante sea: ¿quienes son los Sensorites? Me gusta mucho como Peter R. Newman juega muy bien a dejarnos en un vilo, no dejándonos ver a estas extrañas criaturas hasta el final del episodio. Hasta ese punto nos tenemos que conformar con su comportamiento para con los tripulantes de la nave y ver como una mano bloquea el acceso a la Tardis impidiendo que nuestros protagonistas escapen. Esto consigue que den más mal rollo que los Daleks o los Voords.
Pero para malrrollera, la escena en que la nave, controlada por los Sensorites, está a punto de colisionar contra la Sensphere pero que se detiene en el último instante. No es de extrañar que la tripulación esté muerta de miedo. Están bajo el control de unos seres que en términos de coacción, no se andan con tonterías.
Por si no habíamos tenido suficiente en lo que respecta a la identidad de los supuestos antagonistas del episodio, tenemos la figura de John, el minerólogo (creo que ese es el término) de la expedición. Él si que ha visto a los Sensorites y las consecuencias son las que vemos. El hombre no está bien que digamos. Su figura, en lugar de ayudar a despejar dudas, las alimenta más porque cuando creíamos que estaba a punto de atacar a Bárbara y a Susan, el hombre se desploma aterrorizado.
Empezamos con el aterrizaje de la Tardis en un punto fijo y a la vez en movimiento y que además, emite una estática que impide ver el exterior. Aunque este misterio quedará brevemente en segundo plano por las conversaciones que mantienen los cuatro, nada más salir se verá reforzado por todo lo que se encuentran.
El escenario que tenemos a continuación, la nave espacial, es realmente inquietante por esa imposibilidad de saber que está pasando realmente. Tenemos esos dos tripulantes, que en un principio están muertos, pero que luego resulta que no lo están y que hay unas criaturas (los Sensorites) que a través de telepatía están impidiendo que la nave se escape de la órbita de su planeta (la Sensphere). Aquí es cuando empiezan de verdad las preguntas en el espectador; ¿por que no les dejan huir ni tampoco los llevan a su planeta? ¿por que deciden mantenerles con vida en ese estado de coma?
Pero quizás la pregunta más importante sea: ¿quienes son los Sensorites? Me gusta mucho como Peter R. Newman juega muy bien a dejarnos en un vilo, no dejándonos ver a estas extrañas criaturas hasta el final del episodio. Hasta ese punto nos tenemos que conformar con su comportamiento para con los tripulantes de la nave y ver como una mano bloquea el acceso a la Tardis impidiendo que nuestros protagonistas escapen. Esto consigue que den más mal rollo que los Daleks o los Voords.
Pero para malrrollera, la escena en que la nave, controlada por los Sensorites, está a punto de colisionar contra la Sensphere pero que se detiene en el último instante. No es de extrañar que la tripulación esté muerta de miedo. Están bajo el control de unos seres que en términos de coacción, no se andan con tonterías.
Por si no habíamos tenido suficiente en lo que respecta a la identidad de los supuestos antagonistas del episodio, tenemos la figura de John, el minerólogo (creo que ese es el término) de la expedición. Él si que ha visto a los Sensorites y las consecuencias son las que vemos. El hombre no está bien que digamos. Su figura, en lugar de ayudar a despejar dudas, las alimenta más porque cuando creíamos que estaba a punto de atacar a Bárbara y a Susan, el hombre se desploma aterrorizado.
- "I learnt not to meddle in the affairs of other people long ago" (Aprendí hace tiempo a no interferir en los asuntos de los demas) - Doctor / Ian se ríe / "Don’t be absurd. There’s not an ounce of curiosity in me, my dear boy" (No seas absurdo. No hay ni una pizca de curiosidad en mi, querido muchacho) - Doctor
Este es, sin duda, el momento más divertido del capítulo y sólo hay que ver las caras de Ian y Barbara para darnos cuenta de la incongruencia del propio Doctor, un tipo que SIEMPRE se está metiendo en los asuntos de los demás. No puede evitarlo y por eso nos encanta.
"Cu-cu" (lo que digo siempre que veo este momento)
Nota: El guionista, Peter R. Newman se basó para escribir en este arco en su experiencia en un campo de prisioneros japonés durante la II Guerra Mundial. (Fuente)
Nota 2: Este es el primer serial en el que se especifica claramente que están en el futuro. Concretamente, en el siglo XXVIII.
Titulo: The Unwilling warriors (Los guerreros reticentes) Arco: The Sensorites (Los Sensorites)
Escrito por: Peter R. Newman Dirigido por: Mervyn Pinfield y Frank Cox
Fecha de emisión: 27 de junio de 1964
Bueno, bueno, ahora ya empiezan a ponerse las cosas bastante interesantes.
Seguimos aún sin conocer la identidad de estos Sensorites, pero poco a poco van mostrando sus cartas a través de mensajes telepáticos. Me gusta mucho el diseño de dirección de la escena de John recibiendo mensajes mirando a cámara, con su mirada fija en nuestros ojos, convirtiendo la escena en algo aún más perturbador. No lo menciona directamente, pero sabemos que lo que le estan ordenando es que haga daño a Susan y Barbara.
Este momento tan intenso funciona como gran contraste con la primera aparición oficial de los Sensorites. Y digo contraste porque a primera vista, no tienen esa pinta tan aterradora que nos hacían ver sus actos. Lo que nos lleva a tener aún más dudas respecto a sus motivaciones.
De aquí pasamos a esa habilidad de Susan para comunicarse con los Sensorites. En el post que escribí sobre The Edge of Destruction, comenté brevemente sobre la teoría que circulaba sobre que la raza del Doctor poseía el don de la telepatía entre ellos. Aquí, esa teoría, no sólo se mantiene, sino que se refuerza con la posibilidad de que ellos puedan comunicarse con otras especies. Este poder de Susan va a ser sin duda el hilo conductor del episodio y probablemente de los siguientes también.
También averiguamos cual es el motivo de la expedición a la Sensphere. Este planeta es rico en un mineral que podría utilizarse en la construcción de naves espaciales. Dicho descubrimiento provoca de nuevo un nuevos ataque por parte de los Sensorites en Maitland y Carol, recordándoles que línea no deben traspasar.
- No hace falta que vengas si no quieres - Ian
- Tonterías - Bárbara
Casi 4 minutos del episodio se dedican a la escena de la exploración de la nave por parte de Ian y Barbara, en la que además hablan lo justito (practicamente, el dialogo de la foto de arriba). En dicha escena, ambos personajes, que al igual que nosotros, desconocen las verdaderas intenciones de los Sensorites, se mueven muy lentamente, alimentando el suspense y la tensión.
El enfrentamiento no frontal con Ian, nos hace intuir que, aunque los Sensorites pueden atacar si se sienten amenazados (por lo que ellos mismos dijeron), una de dos; o no quieren atacar realmente o han conseguido entrar en la mente de Ian y saben que él no les va a hacer daño.
Pero volvamos un momento a Ian y Barbara, que a medida que pasa el tiempo, su relación se vuelve menos profesional y más personal (o al menos, eso es lo que todos pensamos). Sólo hay que ver como se agarran de las manos y de la cintura en dicha escena. Me da a mi, que estos dos hacen cosas fuera de plano.
Por cierto. Muy a favor de la combinación "Ian Chesterton - Jerseis de cuello vuelto".
- Y os prometo que provocaré más daño del que podais imaginar,
¡si no me devolvéis mi propiedad! - Doctor
Los últimos segmentos del episodio nos ayudan a descubrir porque los Sensorites no quieren dejar escapar a los tripulantes. Ya sufrieron una invasión hace tiempo, quedando su planeta prácticamente aniquilado. Tiene cierto sentido esta especie de secuestro.
El encuentro final entre el Doctor y compañía y los Sensorites, con los tripulantes de la nave como meros espectadores genera un conflicto de intereses muy bien llevado. Mientras los seres juegan a la pasivo-agresividad conocedores de que tienen la sarten por el mango, el Doctor termina perdiendo los papeles (como vemos en el gif). Todo se termina resolviendo con lo que se podía más o menos intuir; con Susan bajando al planeta a negociar.
Este es otro gran serial de la primera temporada, la primera y única vez que vemos a los primos de los Ood. El Doctor sigue continuando con su evolución como personaje y una vez más soluciona una situación bastante peliaguda sin recurrir a la violencia, o al menos a la violencia explícita.
ResponderEliminarLa relación entre Ian y Bárbara fue uno de los grandes activos de las dos primeras temporadas de la serie, a pesar de sólo haber aparecido en la serie cuando esta aún estaba en pañales son dos de los acompañantes que recuerdo con más cariño.